Siempre he creído en la magia, en los vampiros, en los
hombres lobo; que existe un panteón de dioses que se pasan el día peleando, que
las druidas unen el destino de cada persona con otra, ya sea hermano o
desconocido, y que Artemisa y su mala hostia un día harán que el mundo acabe. He
creído en un mundo paralelo al nuestro, donde pasan cosas que jamás podríamos
llegar a imaginar. Que existen cosas como viajar en el tiempo modificando las
partículas del aire, cuchillos y dagas mágicas capaces de atravesar cualquier
cosa y que se es capaz de volar o caminar sobre el agua.
Quizá “he creído” no sean las palabras más apropiadas, es
mejor decir “quiero creer”, porque sé que todo eso no es cierto, que es
demasiado irreal, fruto de un grupo de personas y su desbordada imaginación,
pero cuando no hay nada más en qué creer siempre queda eso. Porque no me entra
en la cabeza que el mundo en el que vivimos sea tan malo como se ve a simple
vista, tiene que haber cosas buenas, algo que lo haga mejor. Así que, como no
lo encuentro, esto es mi “algo bueno”.
Uno de mis sueños es escribir un libro. Pero no un libro
cualquiera, eso puede hacerlo casi todo el mundo, si no un libro que haga,
aunque sea a una única persona, imaginar que existe un mundo paralelo al
nuestro en el que habitan seres extraídos directamente de mi imaginación. Un
mundo donde todo es posible.
“El hombre del siglo
veintiuno piensa que tiene mejor criterio. Que no hay magia en este mundo.
Ningún ser de otro mundo vendrá tras él. Su ciencia se ha convertido en la
nueva magia y algo así como la gente antiguamente, creen equivocadamente que
eso los protege.
Que los dioses los ayuden el día que se enteren de la verdad, de cómo funciona este universo en realidad. Les deseo ingenuidad eterna,(…). Las personas necesitan sus sueños, sus falsas ilusiones. Platón estaba en lo correcto. Las imágenes en la pared son mucho más fáciles de sobrellevar.” –Diario de Acheron (2003), Sherrilyn Kenyon
Que los dioses los ayuden el día que se enteren de la verdad, de cómo funciona este universo en realidad. Les deseo ingenuidad eterna,(…). Las personas necesitan sus sueños, sus falsas ilusiones. Platón estaba en lo correcto. Las imágenes en la pared son mucho más fáciles de sobrellevar.” –Diario de Acheron (2003), Sherrilyn Kenyon
Si escribes un libro yo lo leo :$
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